miércoles, 29 de octubre de 2008

Los hijos no son tus hijos, son hijos de la vida. K. Gibran

Mientras los padres gastan su tiempo en la oficina, en los estudios de grabación, en las tiendas, en los hospitales, en los restaurantes, en la adminitración pública, en las escuelas, en las universidades, en el sheriff, en los hoteles, en los bares, en busca del pan dólar de cada día, yo disfruto, comparto, enseño, aprendo, río, pienso, juego, recibo abrazos, besos, saludos, dibujos, respondo preguntas, recibo respuestas de esos hijos qué me dan tantas cosas qué la memoria no alcanzará a registrar.
De esos hijos que no son mío.
Y sin embargo la vida me permite disfrutarlos como si lo fuesen.