domingo, 9 de noviembre de 2008

Un nombre.

Hay un nombre que da vueltas en mi cabeza.
Lleva más de una semana visitando mi mente. Como una señal, como una obsesión, como una marca en mis neuronas.

No conozco absolutamente a nadie que lleve ese nombre.
No tengo referencia alguna que me provoque admiración.
No recuerdo ningun personaje del cine, no tengo ni la más remota información sobre él.
No sé su origen, no se su causa, no se por qué está prendida de mi como un mensaje subliminal venido no sé de donde.

He comenzado a escribirle por si las dudas es un fantasma apoderandose de mi.
Siempre he creido que las palabras pueden provocar cercanías. También alejamientos.

Por si las dudas yo le escribo una carta a Raquel.