domingo, 11 de enero de 2009

de cibervidas

Había una vez un blog en el cual contaba sobre mis días, escribía poemas, hablaba de amores. Algunas veces dejaba en claro mis aciertos y otras desnudaba mis defectos. Tenía amigos-enemigos, algunos muy sabios otros bastantes ignorantes. Recibí elogios, libros, flores, diseños, y palabras de amor. También críticas y agresiones.
El blog tenía vida propia y algunos lectores que rumbearon por camino equivocado le agregaron de su propia cosecha.
Como sea, hubo una vez un blog que fue muy mío. Y de tan mío que era lo cerré.

Entonces aparecieron algunas ánimas buscando ciertas letras. Y se encontraron sin ellas. Algunos siguieron de largo otros, los más tercos seguieron buscando hasta encontrar cierta música que les permitió saciar un poco de su curiosidad.
No me canso de decirlo, la red es como la vida misma.
Pero lo más fascinante de la red es que con un leve movimiento en una mínuscula parte uno puede hacer deleted y seguir de largo como si nada jamás hubiese existido.

Desearía encontrar ese punto exacto en la cotidianidad de la vida.

2 comentarios:

Daus dijo...

insisto el efecto mariposa en la red es mucho mas factible, lo bueno es que te animaste a comenzar otro y aunque aveces no comento porque me parece demasiado personal como para andar metiendo mi lengua, si me gusta leerte e imaginar como son las cosas que te suceden "ponerse en el lugar del otro" creo que le llaman.-

- Por otra parte creo que muy difícil escribir de una misma, a mi me cuesta poco, lo lindo de todo esto es que muchas personas comparte o difieren de tus puntos de vista, se conocen personas, se crean lazos de amistad y cariño... se crean redes como también se le dice.-

Usted siga escribiendo que yo la seguiré leyendo, de los desagradables mejor no ocuparse y dejar que la vida siga.-

un saludo

vico dijo...

Daus, tu comentario se me hace tan pero tan acertado!!

Gracias por decirlo...

saludos,