jueves, 4 de febrero de 2010

no ser

En algunos momentos desearía ser otra. Con otra cabeza y otro corazón. Un poco más ágil para escapar a la luz de las emociones, tener los reflejos precisos para envolverme sobre mí misma y ahuyentar los demonios que me autodevoran.

Saber huír antes de tiempo y esquivar los embates de eso que no se ve pero se siente. Dejar de pasar la noche en vela soñando lo que jamás sucederá. Olvidar el abecedario para no escribir más palabras que alejen lo que más se desea atraer. Terminar con esa curiosidad de sentir lo indebido.

Cerrar los ojos del alma, dejar de ver lo que en realidad no existe. Cerrar los oídos, desviarse de lo que el corazón siente. Seguir de largo, mudarse de ciudad, dejarlo todo, irse. Como los blancos claveles sobre el mar, como el reloj sumergido en una caja de zapatos, como el pasado enterrado en una veladora iluminando la oscuridad de la playa en invierno.

En algunos momentos quisiera ser otra con otros sentimientos u otro cuerpo.

2 comentarios:

fabi dijo...

me suele suceder mas de lo que me gustaria. Abrazo sis

vico dijo...

Faby, igualmente.