domingo, 31 de enero de 2010

Historias desde el ómnibus. (una de tantas)


Ciertos colores, son peligrosos de usar.

Lugar: bajando del ómnibus 79 en El Sereno, CA.
Hora: 7.30 pm
Clima: caían pingüinos de punta y agua.
Personajes: muchacha chicana entre 21 y 23 años.
yo, una charrúa perdida en el este de L.A.

Salté el río de agua que corría contra el cordón de la vereda para no mojar más mis zapatillas All Star que ya estaban empadas. Delante de mí, una joven que se pasó los 30 minutos del viaje desde Unión Station hasta la Huntington Dr. conversando con una chinita sobre las bondades de Jack in the Box por sobre Mac Donald, se da vuelta y en inglés me dice:

- ¿Dónde compró su bufanda?

La miro un poco desubicada debido a qué por razones climática y a no llevar ninguna de las dos paraguas no veo la urgencia de entablar una conversación tan "necesaria" en medio de la calle.

- Humm...no recuerdo. Fue hace cuatro años atrás.
- ¡Seguro la compró en West Hollywood! Yo adoro los colores rainbow. My boyfriend los odia. Dice que si los usara lo confundirían con un "joto" y que si yo los usara dirían que soy una "dyke".
- Pues, no la compré en West Hollywood, de eso estoy segura. Creo que fue en Citadel sobre el Free Way 5, en Commerce.

Corro bajo el único techo visible para esperar mi tercer ómnibus rumbo a casa. La chica me sigue. Por la conversación que sostuviera con la chinita anteriormente mencionada, desduzco que no ha de tomar ningún otro ómnibus. Jack in the box se lucía frente a nosotras y ella entraría en 15 minutos a su puesto de cajera donde le pagarían 7 dólares con 50 centavos la hora.

- Yo no soy lesbiana, pero adoro todo lo rainbow. Mire... -y abre la boca y saca la lengua estilo Mick Jagger para mostrarme un piercing de color violeta- ¿Ve?, mire...¿ve el color? es violeta.

La verdad que no vi mucho porque me espantaba recibir alguna señal viral de un aliento que no era el mío.

- Ah sí. Bonito - yo que detesto más que los tatuajes los piercing en cualquier parte del rostro. Y miro para el otro lado a ver si se vislumbra mi salvación o sea mi
omnibus número tres. El de la compañía DASH.

- Es el color de las lesbianas. Me encanta, pero yo no soy lesbiana ¿eh? ¡Ni lo piense! me gustan demaciados los hombres.

- Y...-le digo mirándola por arriva de los lentes- ¡no todas las mujeres somos perfectas!

2 comentarios:

Daus dijo...

dios si a mi un extraño me habla, veo burros de colores. No su que pasa por sus cabezas al hacerlo, pensaran que les ire a contestar. no lo soporto.

vico dijo...

Daus, jaja pues no creas, a veces es interesante. Me mata de risa de que verías burro de colores. Yo una vez en un ómnibus ví dragones verdes pero la historia fué otra. Capaz algún día la cuento aquí.